jueves, 29 de enero de 2009

Un día más...

9:05 A lo lejos lo veo pasar.
Señal de que llego a la misma hora de siempre. "Mañana, cinco minutos antes", pienso.
Los mismos de siempre.
Gorro de pescador. Calvo. Siempre fumando. Muy delgado. A pesar de su físico y su estilo, los años no pasan en valde.
Callada. Abrigo blanco de plumas. Haciéndose con el idioma y preparada para ir a trabajar.
1 minuto antes. Cruza el chuleta. Agujereado por dos piercings en la cara cada día una chaqueta nueva y ajustada, pero se nota que hace años que no pasa por un gimnasio.
9:13 Llega. Subo. Me siento.
Tras dos paradas llegas tú.
Melena rizada al viento. Tez oscura. Belleza mezclada. Cara angelical con labios carnosos.
Eres esbelta y estilizada. Entras sin sentirte observada. Siempre puntual. Siempre sonriendo.
Este post va dedicado a ti, porque cada mañana haces que me fije en ti cuando pasas a mi lado. Teniendo que soportar que estoy tan lejos de un beso como de un "hola" porque el anonimato es lo único que nos mantiene unidos cada día.
No sé si mañana volverás.
9:05... la misma historia de siempre.
A ti. Desconocida.